El Servicio Nacional de Aduanas ordenó la destrucción de un cargamento de más de 18 toneladas de cigarrilos, mercancía de contrabando interceptada por la autoridad aduanera en Terminal Pacífico Sur Valparaíso, concesionario del Terminal 1 del puerto de Valparaíso.
En el caso de las cajetillas de cigarrillos, se trató de 543.350 unidades de las marcas Cumbia y Gold City, que no están autorizadas por las instituciones de salud para ser vendidas en Chile y que ingresaron como contrabando al país.
Camilo Jobet, subgerente comercial de TPS, señaló que "para nosotros la seguridad de toda carga que ingrese por nuestro terminal es un pilar fundamental de nuestra operación, por lo que hacemos un trabajo colaborativo muy detallado con Aduanas, a fin de adoptar todas las medidas necesarias cuando se detectan este tipo de acciones de contrabando."
La Directora de la Aduana Regional de Valparaíso, Ana Karina Ochoa, explicó que "una vez concluidos todos los procesos de control, fiscalización y judiciales relacionados a estas mercancías, pudimos disponer de ellas y agradecemos el aporte de TPS para concretar las destrucciones."
Las mercancías son parte de las fiscalizaciones que detectan el contrabando o el ingreso al país de productos prohibidos o que infringen leyes de propiedad intelectual o de salud pública, entre otras. Fueron trasladadas a Santiago, en camiones, por parte de una empresa especializada en la disposición final de este tipo de productos.
Junto con ello, se dispuso la destrucción de una partida de 9.360 tazones que infringían las normativas de propiedad intelectual al utilizar logos de los clubes deportivos Universidad de Chile y Colo-Colo.