La nave Baltic Heather, de Cool Carriers, zarpó este miércoles desde Terminal Pacífico Sur Valparaíso, TPS, dando inicio a la temporada de fruta 2020-2021.
La nave embarcó 508 pallets y 28 contenedores desde el muelle del concesionario del Terminal 1 de Valparaíso, con destino a Estados Unidos. La presente temporada se extenderá hasta abril, con una proyección de 844 mil toneladas embarcadas desde TPS en naves full container y 188 mil toneladas más en buques cámara.
Con gran experiencia en el manejo de este tipo de carga, TPS se ha preparado intensamente a través de la gestión eficiente de sus operaciones e infraestructura y la coordinación con los distintos actores de la cadena logística para asumir la temporada que tiene un adelanto con la exportación de cherries hacia China a contar de mediados de noviembre.
“Desde hace años que somos un terminal portuario especialista en fruta, movilizando un tercio de la fruta chilena que se exporta. Estamos muy orgullosos de esa misión y tomando todas las medidas de seguridad y eficiencia en conjunto con toda la cadena logística, con un sistema Pre Gate que facilita la trazabilidad de la fruta desde el packing hasta el terminal, lo que nos permite planificar y optimizar nuestros recursos”, explicó Camilo Jobet, subgerente comercial de TPS.
Ricardo Barckhahn, Managing Director de Cool Carriers en Chile, expresó que “tenemos una flota eficiente y en posición para poder satisfacer la demanda que tenemos proyectada, como también se ha trabajado muy fuerte en el desarrollo de nuevas tecnología que han sido implementadas tanto en áreas comerciales y de operaciones. Somos positivos en que esta nueva temporada mostrará aumentos de volúmenes, principalmente por las nuevas variedades que están entrando en producción, como también porque las condiciones climatológicas han sido favorables”.
El ejecutivo agregó que uno de los grandes desafíos de la temporada son las medidas sanitarias que se deben implementar en la cadena logística. “Nuestra flota y tripulaciones están debidamente preparadas, y contamos con la experiencia de haber operado sin problemas en otros mercados, como Sudáfrica y Nueva Zelanda, descargando en Italia, España y Asia”, dijo.
Alan Apablaza, gerente de Operaciones de Global Reefers, dijo que esperan un aumento de volumen de un 10% a 15%, “lo que nos obliga a ser muy responsables en la manera de operar tanto las naves como la carga. Es por esto que hemos trabajado profundamente en medidas y acuerdos con todos los proveedores de la cadena logística como depósitos, transportes, terminales y en especial con nuestros armadores de naves para evitar el riesgo de contagios en el proceso de exportación”.
El ejecutivo destacó que la empresa dispuso un servicio de buques cámara semanal a Wilmington, en la costa este de Estados Unidos, y Los Angeles, en la costa oeste. “El servicio de naves especializadas seguirá siendo rápido, directo y dedicado, lo que permite llegar en 12 días desde Valparaiso o en 11 días desde puertos del norte, lo que da un tremendo plus al producto ya que llegan a los mercados en Estados Unidos con más tiempo para su comercialización”.
Los envíos en buques cámara –que transportan exclusivamente fruta- se concentran en el mercado de Estados Unidos, con trayectos directos, lo que implica menores tiempos de navegación, un factor clave para preservar y extender la calidad de los productos durante su venta en destino. En tanto, en naves full container se transporta fruta principalmente a Asia y Europa.